Chistes de Cajero Automatico
Estos son los 9 chistes de cajero automatico y más graciosos bromas sobre cajero automatico que matan de risa. Lea chistes acerca cajero automatico que sean buenos chistes para niños y amigos en español.
Chistes de cajero automatico para niños y niñas cortos y graciosos
¿Cuál es un buen chiste sobre cajero automatico para hacer reír a la gente? Mira esta lista de historias divertidas que seguramente harán sonreír a todos.
- ¿En qué se parecen los hombres a los cajeros automáticos?
En que si no te dan dinero, ¡No sirven para nada! xD - ¿En que se parece un hombre a un cajero automático?
En que si no da plata, ¡No sirve! - En el gimnasio:
Un hombre de unos 63 años le pregunta al entrenador en el gimnasio:
¿Qué máquina debo usar para lograr impresionar a una chica de 30?
El entrenador se queda mirándolo le y dice...
Le recomiendo el cajero automático.... - Impresión de ancianos Un hombre de unos 65 años le pregunta al entrenador en el gimnasio:
-¿Que máquina debo usar para impresionar a una chica de 30?
El entrenador lo mira y dice...
-Le recomiendo el cajero automático.... - ¿QUÉ TIENEN EN COMUN UN CAJERO AUTOMÁTICO Y UN HOMBRE CASADO? EN QUE SI NO TIENEN PLATA NO SIRVEN PARA NADA
- ¿En qué se parece un hombre a un cajero automático?
En que los dos sólo sirven para dar plata. - ¿En qué se parece un hombre a un cajero automático? en que si no tiene plata no te sirve de nada
- Nuevo Cajero Automático "DRIVE IN" Directamente desde su coche.
Los clientes podrán sacar dinero de su cuenta sin salir del vehíc**.... Para poder aprovechar todas las ventajas que ofrece este novedoso sistema, se han dado las siguientes instrucciones a los clientes:
Hombres:
1. Alínie su vehíc**... junto al cajero automático.
2. Abra la ventanilla.
3. Introduzca su tarjeta de crédito y su código secreto.
4. Indique la cantidad que desea retirar.
5. Retire el importe.
6. Recoja el comprobante.
7. Si lo desea, cierre la ventanilla.
8. Reinicie la marcha.
Mujeres:
1. Acérquese al cajero automático.
2. Vuelva a arrancar el motor que se le ha calado.
3. Vaya en marcha atrás hasta que el cajero vuelva a quedar a su altura.
4. Abra su ventanilla.
5. Vacíe el bolso en el asiento del copiloto y busque su tarjeta de crédito.
6. No es necesario que compruebe ahora su maquillaje en el retrovisor.
7. Intente introducir la tarjeta de crédito.
8. Abra la puerta y salga del vehíc**... para poder llegar al cajero que ha quedado demasiado lejos.
9. Introduzca la tarjeta de crédito.
10. Retire la tarjeta y vuelva a introducirla en el sentido correcto.
11. Coja el bolso, vacíelo de nuevo y busque en la primera página de su agenda dónde tiene apuntado el número secreto.
12. Introduzca el numero secreto.
13. Presione el botón cancelar e introduzca el número correcto.
14. Indique el importe que desea retirar.
15. No es necesario que utilice ahora su pinta labios ni que vuelva a comprobar el maquillaje en el retrovisor.
16. Recoja la tarjeta, el dinero y el comprobante.
17. Busque el billetero en el bolso y guarde el dinero.
18. Ponga el comprobante en su libreta de cheques.
19. No es necesario todavía arreglarse el pelo.
20. Avance su vehíc**... 2 metros.
21. Vuelva a retroceder hasta el cajero.
22. Recoja la tarjeta de crédito.
23. Vacíe el bolso para encontrar la funda de la tarjeta.
24. Mire atrás y compruebe la cola que ha originado para poder contárselo a sus amigas.
25. Arranque el motor que se le ha calado.
26. Conduzca 4 ó 5 kilómetros.
27. Quite el freno de mano. - Entra un abogado a un cajero automatico, de ésos que tienen un sofisticado sistema de seguridad, y de pronto empieza el sistema a sonar una estruendosa alarma acompañada de luces y una voz digital que anuncia a todo volumen:
"Ladrón, ladrón, ladrón..."
El abogado retira la tarjeta de la ranura del cajero, la examina y dice:
"¡Con una...! ¡Me equivoqué... introduje mi tarjeta profesional!"
Contar chistes de cajero automatico es una parte importantísima de cualquier conversación o reunión social. Los chistes, llenos de humor y diversión, tienen la capacidad de liberar tensiones y crear un ambiente relajado y alegre. Pueden contarse en cualquier situación, siempre y cuando sea apropiado y no ofenda a nadie. Contar chistes puede ser especialmente efectivo para romper el hielo al inicio de un evento social, hacer reír a los demás en medio de una conversación o simplemente alegrar el día de alguien que puede necesitarlo. Sin embargo, es esencial recordar que el sentido del humor puede variar de una persona a otra, y lo que para uno puede ser gracioso, para otro puede no serlo.