Chistes de Feroz
Estos son los 21 chistes de feroz y más graciosos bromas sobre feroz que matan de risa. Lea chistes acerca feroz que sean buenos chistes para niños y amigos en español.
Tabla de contenidos
Los Mejores Chistes de Feroz
Estos son nuestros mejores frases chistosas de feroz. Diviértete con un buen bromas de feroz en español con sencillo humor de feroz y fotos para reir.
- Venía por el bosque y me encuentro a Caperucita embarazada, y le pregunto:
- Caperucita ¿que pasó?
- ¿Que caperucita? -me contesta- de ahora en más: SEÑORA DE FEROZ! - Va Caperucita Roja por el bosque, se encuentra al lobo feroz y él le pregunta: ¿A donde vas niña?,Y ella le dice: ¡A usted que le importa! Y él dice: como ha cambiado este cuento.
Chistes de feroz muy buenos y graciosos
Los chistes de feroz para niños y para amigas muy buenos y graciosos siempre son un éxito en las fiestas. La risa está garantizada cuando se comparten estas feroz bromas divertidas.
Un día Caperucita Roja se encuentra con el lobo feroz y el lobo le dice:
- Caperucita, vamos allí detrás de los árboles...
- ¡No!, ¡a la abuela no le va a gustar!
- ¿Qué no le va a gustar?. ¡Si a ella le encantó!...
El lobo feróz había violado a Caperucita Roja y caperucita le dice:
- Le voy a decir a mi mamá que usted me violó dos veces.
Y el lobo le dice a caperucita:
- ¿Dos veces? Si yo solo te viole una vez
Caperucita responde:
- Ah... ¿Es qué ya se va?
Llega donde su mami la Caperucita llena de heridas y esta le dice:
- Hija mía, ¿qué te ha pasado?. ¿Te atacó el lobo feroz?
- No, fue la abuelita, es que empecé a decirle:
"Qué ojos más grandes tienes", "Qué orejas más grandes tienes", !Qué orejas más grandes tienes"...
Resulta que un sábado llegó un circo a una ciudad donde la gente es muy tacaña y toda la mañana se prepararon, y en la tarde empezaron a anunciar por la ciudad.
- ¡Señores y señoras, vengan a mirar el león más feroz del mundo por sólo 50 pesos!
A la hora de la función nadie llegaba, por lo que el dueño decidió bajar el precio y decía:
- ¡Vengan a ver al león más feroz nunca antes visto por sólo 30 pesos!
Pero nadie llegaba, y así siguió bajando el precio, por sólo 20 pesos, 10 pesos, y nada, hasta que al final dijo:
- Pasen a ver el león más feroz, ¡gratis!
Y se llenó la carpa que casi se reventaba, y el dueño del circo puso estacas alrededor de la carpa y después dijo:
- A 200 pesos la salida porque, ¡vamos a dejar libre al león!
Un avión cae en la selva y entre los pasajeros sobrevivientes hay pastusos y un caleño.
Optan por quedarse dentro del avión, pero pasaron 3 días y se acabó la comida. Se reunieron dejando al caleño en un rincón diciéndole:
- Por unanimidad te nombramos como representante para que vayas a conseguir alimento para todos.
- ¿Yo? ¡Pero si sólo tengo este cuchillito!
- Así es caleño, la cosa es que ni siquiera te podrás llevar el cuchillo pues tendrás que dejárnoslo ya que nosotros tenemos que cortar y preparar lo que vayas cazando.
Sacan al pobre caleño del avión empujándolo y éste agarra un pedazo de madera y les deja la navaja. Se va por la selva. Pasan varias horas y no regresa. De repente se asoman todos por las ventanillas y ven al caleño corriendo como el diablo, perseguido por un enorme y feroz león. Todos están de acuerdo que por más que odien al caleño, no lo pueden dejar morir, así que se ponen cerca de la puerta para abrirla en el último segundo ... Viene el caleño con todo lo que puede, se acerca al avión, los de adentro abren la puerta, el caleño se agacha y en ese mismo instante el León da un salto, cayendo éste dentro del avión. El caleño se levanta, cierra la puerta y les grita:
- ¡Vayan pelándolo ... que voy a buscar otro!
Tortuga suicida
Una tortuguita comienza penosa y lentamente a subirse a un árbol. Después de varias horas de esfuerzo, cuando llega a la punta, se lanza al vacío y se da
un feroz golpe en el suelo.
Al rato, la misma tortuguita vuelve a hacer el esfuerzo y lentamente, trepando como puede, llega de nuevo casi a la punta, se lanza y se vuelve a dar otro costalazo.
Nuevamente, testaruda, hace otro tremendo esfuerzo y después de mucho rato y muchos jadeos, va llegando a la punta del árbol cuando se resbala, se vuelve
a caer, agita sus patitas y se pega nuevamente un gran golpe en el suelo.
En el mismo árbol en el extremo de una rama, había una pareja de palomas mirándola con lástima, entonces la paloma hembra le dice al palomo macho:
- Oye, querido, ¿No te parece que ya es hora de que le digamos a la tortuguita que ella es adoptada?
Un ateo estaba paseando en un bosque, admirando toda la belleza de la naturaleza .
- Pero ¡qué árboles majestuosos! ¡Qué poderosos ríos! ¡Qué bellos animales! iba diciendo a medida que caminaba a lo largo del río.
Luego escucha un ruido en los arbustos detrás de él.
Se volteó para mirar.
Fue entonces que vio un enorme oso-pardo caminando en su misma dirección. Se largó a correr lo más rápido que pudo.
Miró por encima del hombro y vio que el oso estaba demasiado cerca. ¡Aumentó la velocidad!
Era tanto su miedo que los ojos se le llenaron de lágrimas.
Fue entonces que se tropezó y cayó desamparado. Rodó por el suelo. Rápidamente, intentó levantarse, pero
El oso ya estaba sobre él, procurando agarrarlo con su fuerte pata izquierda y con la otra pata, lo trataba de agredir ferozmente.
En ese preciso momento, el ateo exclamó: Oh, ¡Dios mío!
Entonces el tiempo paró. El oso se quedó sin reacción. El bosque se sumergió en total silencio.
Hasta el río paró de correr. A medida que una luz clara brillaba, una voz venía del cielo diciendo:
Tú negaste mi existencia durante todos estos años, enseñaste a otros que yo no existía, y redujiste la creación a un accidente cósmico.
¿Esperas que yo te ayude a salir de este apuro?
¿Debo esperar que tengas fé en mí?
El ateo miró directamente a la luz y le dijo:
Sería, de hecho muy hipócrita de mi parte, pedir que, de pronto, me pases a tratar como un creyente.
Más tal vez
¿pudieras convertir al oso y hacerlo cristiano?
Muy bien, dijo la voz. La luz desapareció. El río volvió a correr y los sonidos del bosque regresaron.
Entonces el oso recogió sus patas, las juntó en actitud de oración, hizo una pausa, bajó la cabeza y dijo:
Señor, bendice este alimento que ahora me voy a comer. Amén
Un hombre estaba parado en una esquina y se le acercan dos individuos que lo intiman a que les dé todo el dinero que poseía, sino le darían una fuerte y feroz paliza, a lo que el hombre se niega y recibe la golpiza, logran sustraerle solo $0.50 centavos y entonces al mirarlo casi moribundo le recriminan:
¡Pero vos sos un burro, por tan poco te haces golpear!
Entonces el hombre les responde:
Sí, ¿Y los cien que tengo en la media?
Un circo llega a la ciudad. El dueño empieza a anunciar por todas partes:
- Damas y caballeros, vengan a ver al león más feroz del mundo, solo por 50 dólares!
Pero nadie llegaba, así que bajó el precio:
- Damas y caballeros, vengan a ver al león más feroz del mundo, solo por 30 dólares!
Sin embargo ninguna persona se acercaba, y así fue bajando el precio a 20, 10, 5 dólares... pero nada.
Entonces el dueño anunció:
- Damas y caballeros, vengan a ver al león más feroz del mundo, totalmente gratis!
Como era de esperarse, la carpa se llenó hasta reventar.
De pronto el tipo clavó estacas alrededor de la entrada, y comenzó a gritar:
- La salida a 100 dólares porque...dejaremos libre al león!
De safari
Se encuentran dos amigos y uno le dice al otro ¿qué tal tu viaje por Africa y el safari de gorilas?.
- Bien, bien, muy bien
Anda cuéntame detalles.
- Bueno pues en primer lugar debes pertrecharte: comprar un rifle muy potente y de alta precisión, contratar los porteadores y naturalmente hacerte con un buen perro gorilero.
- Cuando llegas al cazadero tu te subes a un árbol, los porteadores mueven los árboles donde están los gorilas; cuando cae, el perro gorilero se lanza ferozmente a por él y le muerde los cataplines. El gorila se retuerce de dolor, momento que aprovechan los porteadores para echarle una red y ..., ya está cazado.
- El amigo, que sigue el relato, le pregunta: Y entonces... ¿para qué quieres el rifle potente y de alta precisión?
Bueno es que a veces los porteadores se equivocan y mueven tu árbol, te caes, y no tienes más remedio que matar al perro.
Caperucita y el lobo.
Luego de que el feroz animal come a la abuela de la niña, toma la decisión de ocupar el lugar de la anciana en la cama. Al llegar la muchacha, observa la situación, y pregunta:
- ¡Que orejas tan grande tienes abuela!
- ¡Para escucharte mejor!
- ¡Pero que ojos tan grandes!
- Para verte mejor.
- ¡Pero que boca tan grande tienes!
A lo que el lobo cansado contesta:
- Pero niña ... Venís de visita, o solo a sacarme el cuero!
En la última reunión del Comite Internacional en Defensa del Lobo Feroz (C.
I.D.L.F.), el profesor Waltz Freedman termino su discurso con estas estremecedoras palabras:
"¿Fue el Lobo Feroz el culpable o lo fue Caperucita?"
Efectivamente la narración de Perrault se presta a muy diversas interpretaciones. No obstante, hay puntos de acuerdo que son indiscutibles y que pasamos a enumerar:
- Caperucita sabía perfectamente que podía encontrarse con el Lobo Feroz.
- Caperucita no era ajena al hambre del Lobo.
- Si Caperucita hubiera ofrecido al Lobo la cesta de la merienda de su abuelita, muy probablemente no habría ocurrido lo que ocurrió.
- El Lobo no ataca inmediatamente a Caperucita sino que al contrario, conversa con ella.
- Es Caperucita quien da pistas al Lobo y le señala el camino de la casa de la abuelita.
- La abuelita es i**... al confundir a su nieta con el Lobo.
- Cuando Caperucita llega y el Lobo esta en la cama con la ropa de la abuelita, Caperucita no se alarma.
- El hecho de que Caperucita confunda al Lobo con la abuelita, demuestra que la niña iba poquisimo a ver a su abuelita.
- El Lobo con esas preguntas tan tontas y directas quiere alertar a Caperucita.
- Cuando el Lobo, que ya no sabe que hacer, se come a Caperucita, es porque ya no le quedaba otra solución.
Tambien la madre de Caperucita tuvo mucha culpa al no acompañar a su hija.
Estos puntos son, en principio, claros y concisos. Los que se empeñan en desprestigiar al Lobo Feroz no se han parado a pensar en la posible manipulación que se ha hecho de su figura, su actividad y su reacción ante una provocadora profesional como parece ser Caperucita.
Iba caminando la Caperucita Roja por el bosque, cuando de repente se encuentra al lobo feroz y esta le dice:
- ¡Qué orejas más rojas tienes Lobo!
- Sí...
- ¡Lobo, qué hinchadas tienes las venas del cuello!
- Sí...
- ¡Lobo, qué cara más colorada tienes!
- Sí...
- ¡Lobo, qué apretados tienes los dientes!
- Vale ya Caperucita, ¿me quieres dejar cagar en paz?
Va Caperucita Roja por el bosque y ve unas orejas detrás de unos arbustos:
- Lobo Feroz, Lobo Feroz, que te estoy viendo... Las orejas desaparecen y Caperucita sigue caminando. A los cien metros, ve una cola saliendo de detrás de un árbol.
- Lobo Feroz, Lobo Feroz, que te sigo viendo... La cola desaparece y Caperucita sigue caminando. A unos pocos pasos, ve una mandíbula apretada con fuerza tras unas flores.
- Lobo Feroz, Lobo Feroz, que te sigo viendo... A lo que el lobo asoma la cabeza, cabreado y dice:
- Caperucita, ¿me quieres dejar cagar tranquilo?
Un ateo estaba paseando en un bosque, admirando toda la belleza de la naturaleza .
- Pero ¡qué árboles majestuosos! ¡Qué poderosos ríos! ¡Qué bellos animales! iba diciendo a medida que caminaba a lo largo del río.
Luego escucha un ruido en los arbustos detrás de él.
Se volteó para mirar.
Fue entonces que vio un enorme oso-pardo caminando en su misma dirección. Se largó a correr lo más rápido que pudo.
Miró por encima del hombro y vio que el oso estaba demasiado cerca. ¡Aumentó la velocidad!
Era tanto su miedo que los ojos se le llenaron de lágrimas.
Fue entonces que se tropezó y cayó desamparado. Rodó por el suelo. Rápidamente, intentó levantarse, pero
El oso ya estaba sobre él, procurando agarrarlo con su fuerte pata izquierda y con la otra pata, lo trataba de agredir ferozmente.
En ese preciso momento, el ateo exclamó: Oh, ¡Dios mío!
Entonces el tiempo paró. El oso se quedó sin reacción. El bosque se sumergió en total silencio.
Hasta el río paró de correr. A medida que una luz clara brillaba, una voz venía del cielo diciendo:
Tú negaste mi existencia durante todos estos años, enseñaste a otros que yo no existía, y redujiste la creación a un accidente cósmico.
¿Esperas que yo te ayude a salir de este apuro?
¿Debo esperar que tengas fé en mí?
El ateo miró directamente a la luz y le dijo:
Sería, de hecho muy hipócrita de mi parte, pedir que, de pronto, me pases a tratar como un creyente.
Más tal vez
¿pudieras convertir al oso y hacerlo cristiano?
Muy bien, dijo la voz. La luz desapareció. El río volvió a correr y los sonidos del bosque regresaron.
Entonces el oso recogió sus patas, las juntó en actitud de oración, hizo una pausa, bajó la cabeza y dijo:
Señor, bendice este alimento que ahora me voy a comer. Amén
Un curita misionero es raptado por los caníbales, y como opone mucha resitencia le sueltan a la mascota, un feroz león.
El cura intenta huir del animal, pero se agota y empieza a rezar con mucha fe:
- ¡Señor, haz que este león se vuelva cristiano!
De pronto, el león se para, se arrodilla, junta sus patas y dice:
- Señor, bendice los alimentos que vamos a tomar.
En medio de un feroz incendio,el jefe de bomberos descubre que faltan dos de sus hombres.
Inquieto comienza a buscarlos, sin resultado alguno.De pronto,se da cuenta que uno de los camiones se mueve rítmicamente y de manera extraña,se acerca,abre la puerta y descubre a sus dos hombres,uno encima del otro en pleno fuqui-fuqui.
Asombrado exclama:
-Pero que estan haciendo?
-Es que mi compañero tenia problemas de asfixia
-exclama uno de ellos.
-¿Y por que no le haces la respiracion boca a boca?
-¡¿Y cómo cree que empezamos?!
En medio de un feroz incendio, el jefe de bomberos descubre que faltan dos de sus hombres.
.. inquieto comienza a buscarlos, sin resultado alguno.
De pronto, se da cuenta que uno de los camiones se mueve rítmicamente y de manera extraña, se acerca, abre la puerta y descubre a sus dos hombres, uno encima del otro en pleno acto sexual y dice :
- ¿Pero qué m**... están haciendo?
Uno de ellos responde :
- Es que aquí el compañero tenía problemas de asfixia por el humo.
- ¿Y por qué no le haces respiración boca a boca?
- ¿Y cómo cree que empezamos?
Resulta que un sábado llegó un circo a la ciudad de Monterrey y toda la mañana se prepararon, y en la tarde empezaron a anunciar por la ciudad.
¡Señores y señoras, vengan a mirar el león más feroz del mundo por sólo 50 pesos!
A la hora de la función nadie llegaba, por lo que el dueño decidió bajar el precio y decía:
¡Vengan a ver al león más feroz nunca antes visto por sólo 30 pesos!
Pero nadie llegaba, y así siguió bajando el precio, por sólo 20 pesos, 10 pesos, y nada, hasta que al final dijo:
Pasen a ver el león más feroz, ¡gratis!
Y se llenó la carpa que casi se reventaba, y el señor puso estacas alrededor de la carpa y después dijo:
A 200 pesos la salida porque, ¡vamos a dejar libre al león!
Los chistes son una forma popular de entretenimiento que típicamente consta de una anécdota o historia cómica con un final sorpresivo y gracioso. Existen muchos géneros de chistes, como los chistes de niños, los chistes de adultos, entre otros. El propósito principal de los chistes es provocar risa, normalmente atravesando conceptos o situaciones comunes en la vida de una manera humorística y a menudo irónica. La habilidad de contar chistes y hacer reír a las personas es una gran forma de romper el hielo y de conectar con los demás.
Contar chistes de feroz es una parte importantísima de cualquier conversación o reunión social. Los chistes, llenos de humor y diversión, tienen la capacidad de liberar tensiones y crear un ambiente relajado y alegre. Pueden contarse en cualquier situación, siempre y cuando sea apropiado y no ofenda a nadie. Contar chistes puede ser especialmente efectivo para romper el hielo al inicio de un evento social, hacer reír a los demás en medio de una conversación o simplemente alegrar el día de alguien que puede necesitarlo. Sin embargo, es esencial recordar que el sentido del humor puede variar de una persona a otra, y lo que para uno puede ser gracioso, para otro puede no serlo.