Chistes de Melocotón

Chistes de melocotón para niños y niñas cortos y graciosos

¿Cuál es un buen chiste sobre melocotón para hacer reír a la gente? Mira esta lista de historias divertidas que seguramente harán sonreír a todos.

1. Tres monjas van paseando. Una de ellas se pone a hablar de los
   tremendos melocotones que ha probado en California, mientras hace gestos
   con las manos. La otra le cuenta lo grandes que eran los platanos que ha
   visto en Jamaica. La tercera monja, que es sorda, pregunta :
   - El padre quien ?...
2. Va una mujer a la consulta...: - Doctor, doctor, tengo el clítoris como un melocotón. - ¿De grande? - No, de sabrosónn..
3. Un niño le dice a otro:
   Yo tengo un perro que habla.
   El otro niño no se extraña nada y le contesta:
   Pues yo tengo un bote que también habla.
   ¿Y qué dice?
   ¡Melocotón en almibar!
4. Al salir de clase, el profesor de Jaimito le da una nota para su hermana:
   Profesor:
   - Jaimito dale esta nota a tu hermana pero ni la abras ni la leas.
   Jaimito:
   - Vale vale..
   Nada más salir de clase, Jamito la abre y pone:
   "Esta noche a las 12 en el callejón"
   Jaimito se la da a su hermana y a las 12 va y les espia ve que el profesor le toca las tetas a su hermana. Al día siguienete, en clase le dice el porfesor:
   - Niños hacedme una redacción sobre frutas.
   Jimito escribe:
   Como le vuelvas a tocar las peras a mi hermana, le meto una patada en el plátano que se le caen los melocotones.
5. Dos pijas y una gitana Están dos pijas y una gitana hablando entre ellas y comentando lo buenos que eran sus maridos. La primera pija dice:
   - Pues mi marido, o sea papuchi, me ha regalado un yate para ir de compras hasta Italia.
   Y contesta la gitana:
   - Maravilloso, maravilloso!
   La segunda pija comenta:
   - Eso no es nada, mi marido, el principito como yo le llamo, me ha regalado un yet privado y puedo irme de compras hasta New York
   Y dice la gitana:
   - Maravilloso, maravilloso!
   Le preguntan las pijas a la gitana:
   - Bueno y a tí que te ha regalado tu madrido.
   - Pues a mí me ha regalado un Logopeda
   - Y eso??? para qué??
   - Pues mirad, yo antes decía malacatones y ahora digo melocotones. Antes decía fragoneta y ahora digo furgoneta y antes decía me suda to er c**... y ahora digo MARAVILLOSO
6. estoera una gitana y un gitano qe le toca el euromillon entonces le dice la gitana al gitano:manue yo quiero ir a un club social donde van las payas estas y le dice el gitano:maria donde vamos nosotros si nosabemos ni abla ni escrribi y le dice la gitana po bamonos a una escula pa qe nos aprenda y elgitano acepta cuando salen van al club los hombres con los hombre y las mujerees com las mujeres entonces dice una mujer pues ami mi marido por nuesttro aniversario me regalo un descapotable exclusivamente para mi y le dice a la gitana bueno a ti qe te parece y le dice me encata me encanta y otra mujer dice pues ami por mi cumpleños mi marido me regalo un collar de tifanis y le pregunta a la gitana bueno ati qe te parece y dice me encanta me encanta y le dice unas de la mujeres bueno qe a echo tu marido por ti y dice pues mira yo antes era una gita muy guarra y no sabiamos ni ablar ni escribir y nos toco el euromillon y nos fuimos a aprender a escrir y a aablar por ejemplo yo antes decia amoto ahora digo moto antes decia malacatonesy ahora digo melocotones y yo antes decia de sua el c**... y ahora digo me encatame encanta FIN
7. jaimito dale esta carta a tu hermana para que valla al parque despues pasa jaimito por el parque y ve a al profesor tocandole las tetas a su hermana el dia siguiente el profesor manda a desir el dia siguiente tres frutas al dia siguiente el profesor le pregunta di tres frutas jaimito jaimito dice como le buelbas a tocar los melocotones a mi hermana te doy en el platano y te van a doler los kiwis

Contar chistes de melocotón es una parte importantísima de cualquier conversación o reunión social. Los chistes, llenos de humor y diversión, tienen la capacidad de liberar tensiones y crear un ambiente relajado y alegre. Pueden contarse en cualquier situación, siempre y cuando sea apropiado y no ofenda a nadie. Contar chistes puede ser especialmente efectivo para romper el hielo al inicio de un evento social, hacer reír a los demás en medio de una conversación o simplemente alegrar el día de alguien que puede necesitarlo. Sin embargo, es esencial recordar que el sentido del humor puede variar de una persona a otra, y lo que para uno puede ser gracioso, para otro puede no serlo.