Chistes de Mosquear
Estos son los 15 chistes de mosquear y más graciosos bromas sobre mosquear que matan de risa. Lea chistes acerca mosquear que sean buenos chistes para niños y amigos en español.
Chistes de mosquear para niños y niñas cortos y graciosos
¿Cuál es un buen chiste sobre mosquear para hacer reír a la gente? Mira esta lista de historias divertidas que seguramente harán sonreír a todos.
- Gran organo El ginecólogo todo asombrado a la señora despatarrada:
- Ah! que c**... más grande,... que c**... más grande!!!
La señora, un poco mosqueada, le contesta:
- Vale doctor vale, pero no lo repita.
El doctor con toda su sorna a la señora:
- Si no lo repito señora, no lo repito, es el eco. - La madre superiora estaba mosqueada con el comportamiento de una novicia, que todas las noches se iba a su celda con una palangana de agua. Una noche decidió espiarla, miró por el ojo de la cerradura, y encontró a la novicia en pelotas, lavándose, y decía:
- ¡Toma, toma! Hambre pasaras, pero lo que es sed... - Esto es un borracho que llega tarde a su casa y ve a su mujer algo mosqueada,y le pregunta:
-¿que tal?
el borracho contesta:
-genial he llegado hasta el servicio sin caerme se ha ecendido la luz automaticamente y he meado.
Su mujer le grita enfadada:
-!Ya te has vuelto a mear en la nevera! - Tres cervezas Entra un hombre en un bar y el camarero educadamente le pregunta:
- ¿Qué le sirvo?
A lo que el hombre le contesta:
- Me sirve... tres cervezas.
- ¿tres cervezas? - Le pregunta el camarero sorprendido.
- Si, una para mí, otra para ti, y otra para tu p**... madre.- Le contesta el hombre.
El camarero sorprendido y a la vez mosqueado se aguanta las ganas de darle un buen puñetazo, por respeto y por temor a ser despedido, ya que piensa... puede que sea la última vez que venga por allí, y no merece la pena ponerse a malas….. por lo que le sirve las tres cervezas.
Al día siguiente el camarero al poco de abrir el bar, ve sorprendido que acaba de entrar el mismo hombre del día anterior.
El hombre se acerca hasta él y le dice:
- Quiero que me sirvas 3 cervezas.
El camarero con precaución por lo sucedido el día anterior le vuelve a preguntar:
- ¿Tres cervezas?, vamos a ver ¿hoy para quién son?
El hombre le responde:
- Una para mí, otra para ti, y otra para tu p**... madre.
El camarero no se puede aguantar las ganas, sale de la barra y le da una buena paliza. Al final el hombre se va magullado y casi sin poder andar. El dueño del bar que ha visto lo sucedido no despide al camarero, ya que cree que el comportamiento de su empleado ha sido justificado.
Al día siguiente el camero colocaba está colocando las jarras de cerveza, cuando todo incrédulo ve aparecer por la puerta al mismo hombre con un ojo morado, la pierna derecha vendada y el brazo izquierdo en cabestrillo. El hombre se acerca a él y le dice:
- Quiero 2 cervezas.
El camarero bastante mosqueado le pregunta.¿Dos cervezas, para quién?,
- Una para mí, y otra para tu p**... madre. Para ti nada, que te sienta mal el alcohol y te pones muy nervioso. - Un equipo de lepe va a jugar a Barcelona y salen los jugadores de lepe muy eufóricos con sus camisetas blancas y con el número en negro menos el nueve que lo llevaba rojo. Un espectador se da cuenta y le pregunta al de al lado:
Oye, ¿Sabes tú por qué el jugador nueve lleva el número rojo?
Y le contesta:
Pues, la verdad es que no tengo ni idea, sube a ver si el comentarista sabe algo.
En eso que sube y le dice al comentarista:
Oye, ¿Sabes tú por qué el número nueve lleva el número en rojo?
Y el comentarista le dice:
Pues, la verdad es que no tengo ni idea, ve al banquillo y ve si el entrenador sabe algo.
Va al banquillo y le pregunta al entrenador:
Oye, ¿Sabes tú por qué el jugador número nueve lleva el número rojo y los demás en negro?
Y éste le contesta:
Pues, la verdad es que no te puedo ayudar porque no tengo ni idea y le dice el entrenador, mira ves allí que esta el médico que es su hermano y le preguntas que por qué cojones lleva el número en rojo y los demás en negro.
El tío todo mosqueado se va para allá y le pregunta:
¿Oye, sabes tú por qué el número nueve lleva el número en rojo y los demás en negro?
Pilla y le dice:
Pues, claro que lo sé.
Y le pregunta el aficionado todo ansioso:
¿Y por qué?
Pues, porque se llama Domingo. - En lo alto de una montaña, un dominguero se encuentra a un pastor cuidando ovejas, y por entablar una conversacion trivial, le dice:
- Buen hombre, ¿le dan mucha lata las ovejas?
- Cuales, ¿las blancas o las negras?
- Pues las negras mismo.
- Si, si que dan trabajo.
- ¿Y las blancas?
- También.
El hombre extrañado, pregunta de nuevo:
- Buen hombre, ¿comen mucho estas ovejas?
- Cuales, ¿las blancas o las negras?
- Pues las blancas mismo.
- Si, si que comen bastante.
- Y las negras ?
- También.
- ¿Y le dan mucha leche las ovejas?
- Cuales, ¿las blancas o las negras?
- Pues las negras mismo.
- Si, si que dan bastante.
- ¿Y las blancas ?
- También.
El hombre mosqueado dice:
- ¿Por qué siempre me dice que si las blancas o las negras?
- Porque las negras son mias.
- ¿Y las blancas?
- También. - La tía le dice a Jaimito:
- ¡Que lindos perritos! ¿Qué raza son?
- ¡Uno es dalmata!
- ¿Y el otro?
- También.
- Ahh y, ¿son machos?
- Uno sí.
- ¿Y el otro?
- También.
La tía ya mosqueada le pregunta de nuevo:
- ¿Se portan bien?
- Uno si.
- ¿Y el otro?
- También.
- Ya está bien pepito, ¿por qué me dices uno si y luego el otro también en lugar de decirme los dos?
- Ah, es que uno es mío....
- ¿Y el otro?
- ¡¡¡También!!! XD - Una mujer va al Ikea a comprar un armario. Para que le saliera más barato lo compra desmontado, para montarlo ella en casa.
Llega a su casa, lo monta y le queda perfecto, pero en ese momento pasa el metro (vive justo encima de la estación de Paseo de Gracia) y el armario cae desmontado al suelo provocando un gran ruido.
Mosqueada, lo vuelve a montar, vuelve a pasar el metro y el armario se cae a trozos de nuevo...
A la tercera, mosqueada, llama a Ikea, explica el problema y le dicen que le envían un técnico.
Llega el técnico, monta el armario, queda de narices. Pasa el metro y ¡Brruuuuummmmm!, el armario se desmonta otra vez.
Finalmente le dice a la señora:
- Mire, lo monto otra vez, me meteré dentro y cuando pase el metro, desde dentro, veré mejor por dónde cae.
Lo monta, se mete dentro y en aquel momento llega el marido de la mujer:
- Cariño, ¡qué armario tan bonito!
Abre la puerta, ve al instalador, y le dice:
- Y, usted , ¿qué hace aquí?
- Pues mire, le voy a decir que he venido a follarme a su mujer, porque si le digo que estoy esperando el metro, no se lo va a creer... - Jesucristo en el bar Están en un bar un inglés, un alemán y un español tomando juntos unas copas. De pronto el inglés le dice a los otros dos:
-Oye, no os parece que el que está ahí en frente es igualito a Jesucristo?
-No digas tonterías, que va a ser Jesucristo, le responden el alemán y el español.
-Insiste el inglés. Que si, que sí. No veis que es igualito. La barba, la túnica……Estoy seguro que es Jesucristo.
Sin pensárselo un segundo, se levanta el inglés, se va hacia el hombre de la mesa y tanto le insiste, que el hombre le susurra al inglés:
- Escucha, efectivamente soy Jesucristo, pero te pido por favor que hables bajito y no se lo digas a nadie porque como los demás se enteren me vas a formar un escándalo impresionante en la cafetería
Entonces, el inglés,loco de contento le dice bajito al oído:
- Mira tengo una lesión en la espalda que me hice de pequeño haciendo deporte. Por favor, cúrame.
Jesucristo le pone la mano sobre la espalda y le cura.
Acto seguido el inglés se va a su mesa y, claro, le cuenta el milagro al alemán y al español.
El alemán, sin poder contenerse, se levanta y va hasta la mesa de Jesucristo y le dice:
- Oye, que me ha dicho mi amigo que tú eres Jesucristo. Tengo un ojo de cristal, por favor cúrame.
Jesucristo le pone la mano en el ojo y se lo cura.
Entonces el alemán se va a su mesa y se lo cuenta a sus amigos.
Jesucristo empieza a pensar que en breves instantes aparecerá por allí el español queriendo, como todos, que le cure, pero pasa el tiempo y el español no va. Entonces Jesucristo, ya mosqueado y picado por la curiosidad, se levanta y se va hacia la mesa donde están los tres y poniéndole una mano en el hombro al español le pregunta:
- Oye, ¿tú por qué no...?
Y el español salta de la silla y apartándose violentamente le dice:
- ¡¡¡¡EH, EH, EEEHHHH!!!! ¡¡¡¡SIN TOCAR…..SIN TOCAR,QUE ESTOY DE BAJA!!!! - En un vagón de tren viajan una gorda, una rubia guapísima, un alemán y un andaluz. De pronto el tren se mete en un túnel y se queda el vagón a oscuras. Entonces se oye un guantazo enorme: ¡ZASCA!
El tren pasa el túnel y vuelve la luz. Los cuatro pasajeros se quedan pensando en lo que ha podido ocurrir.
a) La gorda piensa: Seguro que el andaluz le ha metido mano a la rubia, la rubia se ha mosqueado y le ha dado un guantazo.
b)La rubia piensa: Seguro que el andaluz ha intentado meterme mano, se ha equivocado y la gorda le ha dado una ostia.
c) El alemán piensa: Seguro que el c**... del andaluz le ha metido mano a la rubia, la rubia se ha equivocado y me ha dado la ostia a mí.
d) El andaluz piensa: A ver si llega otro túnel, nos quedamos a oscuras, que si no no hay quien se duerma la siesta a gusto... - Entra un señor en un bar..., el camarero educadamente le pregunta:
- ¿Qué desea?
A lo que el señor le contesta:
- Quiero... 3 cafés.
- ¿3 cafés? - Le pregunta el camarero sorprendido.
- Si, uno para mí, otro para ti, y otro para la zorra de tu
madre.- Le contesta el señor.
El camarero atónito y mosqueado se aguanta las ganas de darle un puñetazo por decoro y por temor a que le despidan, y piensa...
quizás sea la última vez que venga por aquí, y no merece la pena.
Pone los tres cafés.
Al día siguiente el camarero acaba de abrir el bar, cuando de nuevo sorprendido ve como el mismo señor del día anterior entra en el bar.
El señor se acerca hasta él y le dice:
- Quiero que me ponga 3 cafés.
El camarero precavido por el día anterior le vuelve a preguntar
- ¿3 cafés?, a ver ¿para quién son?
El señor le contesta:
- Uno para mí, otro para ti , y otro para la zorra de tu madre.
El camarero no se aguanta las ganas, sale de la barra y le da una paliza de código rojo. Al final el señor se va casi sin poder caminar, pero el dueño del bar no despide al camarero puesto que ve que el comportamiento del camarero ha sido justificable.
Al día siguiente el camero colocaba las tazas de café, cuando todo incrédulo ve aparecer al señor por la puerta con un ojo morado, la pierna vendada, el brazo en cabestrillo. El señor se acerca a él y le dice:
- Quiero 2 cafés.
El camarero enrarecido le pregunta, dos cafés, para quién?
- Uno para mí, y otro para la zorra de tu madre. Para ti no, que te pones muy nervioso... O_o - Van dos tíos por el desierto
- Oye ¡que roca mas rara! ¡Si parece una pirámide!
Se ponen a excavar (sin herramientas) y desentierran una pirámide enorme.
- ¡Es una pirámide de la leche! - ¡Vaya que sí! - Y ahora, ¿qué? ¿Sabes lo que te digo?
Que vamos a avisar al equipo arqueológico de Estados Unidos. Esa gente es profesional y seguro que sabe de que va esto.
- Vale.
Viene el equipo arqueológico americano con sus "jeeps", camiones, caravanas y helicópteros llenos a rebosar de aparatos científicos. Se meten en la pirámide y, al cabo, de dos años salen.
- Vaya, si que han estado tiempo. ¿Qué han averiguado?
- Pues -responde el portavoz del equipo americano- después de laboriosas investigaciones, hemos comprobado que esta pirámide fue construida entre el 1500 y el 2500 antes de Cristo.
- ¡Sólo eso! ¡Después de dos años sólo han averiguado eso!
- Pues sí.
- ¡Anda, largo de aquí, yanquis de m**...!
Los dos tipos mosqueados deciden llamar a los alemanes
- Esos sí que sí, ¡los alemanes son muy metódicos!
Vienen los alemanes, se meten en la pirámide, pasan dos años y salen.
- ¿Qué...?
- Hemos averiguado que la pirámide fue construida en torno al 2000 antes de Cristo.
- ¿Y...?
- Bueno, no hemos podido averiguar más, los jeroglíficos son muy complicados.
- ¡Pues vaya m**... de científicos, hala, a vuestra p**... casa!
Los dos tipos bufan con resignación.
- No nos queda mas remedio que avisar a LA GUARDIA CIVIL ESPAÑOLA.
Llega la pareja de guardias civiles, se meten dentro y en dos horas salen.
- ¡Qué pronto! ¿Qué han averiguado?
- Sabemos que la pirámide fue construida entre el 12 de febrero de 1858 y el 22 de julio de 1857 antes de Cristo, conforme a las órdenes del faraón Anekhetop IV, y su arquitecto Tutmosis el Joven. El día de la inauguración estaba nuboso y una rama de sacerdotes se oponía a ello, por haberse producido un eclipse parcial de luna en Sagitario...
Participaron 2.118 esclavos no cualificados que intentaron una revuelta por las insanas condiciones de trabajo, que fue sofocada el 5 de septiembre por los soldados del faraón, con resultado de 42 muertos. El coste de la obra se cifra exactamente en 658 libras de oro puro y 3 libras de diamantes.
La esposa del Faraón lucía un modelito del modisto Perfilotis el Julandrón, de fina pedrería y la influencia en la lengua se comprueba en el acento de las tierras altas que presentaban los nobles de bla, bla, bla,..y así una hora de charla.
- ¡c**...!, ¿cómo lo han conseguido?
- Hombre, la verdad nos ha costado, pero al final la momia ha cantado. - Van 2 tíos por la jungla y los pilla una tribu.
Se los llevan al poblado atados con cuerdas y los ponen delante del jefe.
El jefe mosqueado al ver intrusos, se pone serio y le dice al primero:
Tu castigo sera MACUMBA o LA MUERTE, escoge.
El tipo confuso en un acto reflejo por salvar la vida contesta:
Quiero MACUMBA!
Entonces sale un Negraco con 40 cm de fiambre entre las piernas y le da (a pelo, sin vaselina ni na y bien duro) .
Cuando acaba el jefe mira al otro y le dice:
Tu que querer MACUMBA o LA MUERTE?
Sin dudarlo respondió rápidamente.
Quiero la muerte!!!!!!
Y dice el Jefe: 40 cm, vete a buscar a tus hermanos y dadle MACUMBA hasta que se muera…. - Una señora acude al ginecólogo porque estaba un poco mosqueada por una raya negra que tenía en la entrepierna, justo en la ingle.
El médico la examina, le dice que no parece grave y le receta una pomada, pidiéndole que regrese a los quince días.
Pasado ese tiempo, la mujer vuelve y resulta que la raya no había desaparecido, sino que, aún más, esta se había ensanchado. Entonces, el ginecólogo le receta una pomada más fuerte y le pide regresar en ocho días.
La señora vuelve y la raya era más ancha aún, tanto que ahora el mosqueado era el médico. Tratando de encontrar una solución comienza a interrogarla:
- Dígame, ¿a qué se dedica su marido?.
- Es carpintero.
- ¡Ahí está, joder!. ¡Dígale a su esposo que cuando le coma el c**... se quite el lapiz de la oreja, cojones!. - Control de alcoholemia Un borracho va en el coche dando bandazos de lado a lado por lo que una patrulla policial lo detiene en el arcén . Al salir del coche el policía le dice que le va a hacer un control de alcoholemia a lo que el borracho le contesta :
-No puedo , ya que tengo un asma muy grave y esto puede desencadenar un ataque.
A lo que el policía le replica:
-Entonces le tendremos que hacer un análisis de sangre.
Contesta el borracho:
-Eso no va a poder ser ya que soy hemofílico y si una herida está abierta puede ser que muera desangrado.
El policía ya medio mosqueado le dice:
-Me tendrá que dar entonces una muestra de o**....
Dice el borracho:
-No , ya que tengo diabetes y esto podría subirme azúcar y morir.
Al policía ya le sale humo de la cabeza y le dice cabreado:
-Entonces salga del coche y camine en línea recta para realizarle el test de equilibrio.
El borracho de nuevo le responde:
-No va a poder ser ¿Y por qué no? (Dice el policía)
-Bueno por que estoy borracho!!!
Contar chistes de mosquear es una parte importantísima de cualquier conversación o reunión social. Los chistes, llenos de humor y diversión, tienen la capacidad de liberar tensiones y crear un ambiente relajado y alegre. Pueden contarse en cualquier situación, siempre y cuando sea apropiado y no ofenda a nadie. Contar chistes puede ser especialmente efectivo para romper el hielo al inicio de un evento social, hacer reír a los demás en medio de una conversación o simplemente alegrar el día de alguien que puede necesitarlo. Sin embargo, es esencial recordar que el sentido del humor puede variar de una persona a otra, y lo que para uno puede ser gracioso, para otro puede no serlo.