Chistes de Pescaderia
Estos son los 7 chistes de pescaderia y más graciosos bromas sobre pescaderia que matan de risa. Lea chistes acerca pescaderia que sean buenos chistes para niños y amigos en español.
Chistes de pescaderia para niños y niñas cortos y graciosos
¿Cuál es un buen chiste sobre pescaderia para hacer reír a la gente? Mira esta lista de historias divertidas que seguramente harán sonreír a todos.
- En la pescaderia En la pescadería, comprando para la cena de navidad:
- Muy buenas, hay gambas?
- Muy buenas.
- Muy buenas, hay gambas?
- Muy buenas
- .... - Llega un niño muy feo a la pescadería y dice:
Póngame bonito.
El dependiente responde:
¿Niño tú te crees que aquí hacemos milagros?
Va un niño muy feo a una pescadería y dice:
- ¿ Me ponen bonito ?
Y dice la pescadera:
- Niño, ¿ tu que crees que hacemos milagros ?- una vieja de 80 años va a la pescaderia y dice
-pescadero,¿tienes agallas?
dice-si,claro
-PUES COMEME EL COÑO!!! - Este es un feo, muy feo, que va a la pescadería y dice:
Por favor, póngame bonito.
Y el pescadero le responde:
Oye chaval, que aquí no hacemos milagros. - Va un niño muy feo a una pescadería y le pregunta a la dependiente:
Me pone bonito.
Y la mujer le responde:
¡Oye niño, tú te crees que aquí hacemos milagros! - Una señora entra a una pescadería y pregunta:
- Perdone, ¿tienen ballena?.
- Si señora, por supuesto.
-pongame entonces dos filetes...Ah!! y echeme la cabeza para el gato por favor...
Contar chistes de pescaderia es una parte importantísima de cualquier conversación o reunión social. Los chistes, llenos de humor y diversión, tienen la capacidad de liberar tensiones y crear un ambiente relajado y alegre. Pueden contarse en cualquier situación, siempre y cuando sea apropiado y no ofenda a nadie. Contar chistes puede ser especialmente efectivo para romper el hielo al inicio de un evento social, hacer reír a los demás en medio de una conversación o simplemente alegrar el día de alguien que puede necesitarlo. Sin embargo, es esencial recordar que el sentido del humor puede variar de una persona a otra, y lo que para uno puede ser gracioso, para otro puede no serlo.