Chistes de Consejeras

Estos son los 2 chistes de consejeras y más graciosos bromas sobre consejeras que matan de risa. Lea chistes acerca consejeras que sean buenos chistes para niños y amigos en español.


Chistes de consejeras para niños y niñas cortos y graciosos

¿Cuál es un buen chiste sobre consejeras para hacer reír a la gente? Mira esta lista de historias divertidas que seguramente harán sonreír a todos.

  1. GUARDABOSQUES Se levanta el telón y se ve un guardabosque tirandose a una alcaldesa
    Se vuelve a levantar y sale otro guardabosque tirandose a una consejera
    Se vuelve a levantar de nuevo el telón , sale otro guardabosques tirandose a la mujer de Obama
    Se cierra el telón , como se llama la pelicula ?
    Los power ranger
  2. Relato de lo que ocurrió el día en que el visir se enamoró de los pechos de la reina
    Amit era un alto funcionario de la corte del Rey Akbar.
    Hacía mucho tiempo estaba obsesionado con el deseo incontrolable de gozar de los voluptuosos pechos de la reina hasta hartarse.
    Por supuesto, nunca había podido hacerlo.
    Un día reveló su deseo a Birbal, principal consejero y Contador de la Corona, y le pidió que hiciese algo para ayudarlo.
    Birbal, después de mucho pensar, acordó, con la condición de que Amit le pagara mil monedas de oro. Amit aceptó el acuerdo.
    Al día siguiente Birbal preparó un líquido que causaba picazón y lo derramó en el sutien de la reina mientras ésta tomaba un baño;
    Pronto el escozor comenzó y fue aumentando en intensidad, dejando al rey preocupado y a la reina muy molesta.
    Se hicieron consultas a los médicos, y ante la falta de respuesta de éstos Birbal dijo que a su entender sólo una saliva especial, aplicada por cuatro horas, curaría el mal. Birbal también dijo que esa saliva tan especial podría ser encontrada en la boca de Amit.
    El Rey Akbar se puso muy feliz y llamó a Amit, quien durante las cuatro horas siguientes se cansó de gozar a voluntad los suculentos y deliciosos pechos de la reina, haciendo todo lo que siempre había deseado.
    Con su deseo ya plenamente realizado y su libido satisfecha, Amit se negó a pagarle a Birbal lo que habían convenido; además se burló de él y se le rió en la cara.
    Sabía que, naturalmente, Birbal nunca podría contar el hecho al rey. Pero Amit había subestimado al Contador de la Corona, hombre de muchos recursos como todos los de su profesión.
    Al día siguiente Birbal colocó el mismo líquido en los calzoncillos del rey.
    Moraleja: Nunca dejes de pagarle a tu Contador