Chistes de Cruz Roja

Chistes de cruz roja para niños y niñas cortos y graciosos

¿Cuál es un buen chiste sobre cruz roja para hacer reír a la gente? Mira esta lista de historias divertidas que seguramente harán sonreír a todos.

1. En un cruce de cuatro caminos un colectivo cruza con luz roja, atropellando a una mujer en su auto.
   ¿Quién tiene la culpa?
   La mujer porque esta afuera de la cocina.
2. Esto es un hombre que va con su fabuloso coche verde.Y va y se ve la carretera verde los coches verdes los arboles verdes todo verde y va se distrae y se choca contra una placa verde.Y va viene la cruz roja y caga el chiste.
3. Va un perro verde
   corriendo por el campo verde,
   pasa un semaforo verde,
   salta la verja verde,
   cruza la carretera verde,
   viene un coxe verde y lo atropella,
   viene la cruz roja y caga el chiste>:(
4. esta un niño verde en un campo verde k caminaba y se cae al suelo verde k se da contra la farola verde k sangra sangre verde viene la cruz roja y jode el xiste
5. una tortuga y un caracol van caminado y,sin saber como ,se estreyan llegan los bomberos ,policia,la cruz roja y la cruz verde ., por fin , unos socorristas le pregunta n al caracol como fue el impacto no se todo s cedio tan rapido.
6. Habia un barrio verde con personas verdes y vino la cruz roja y nos arruino el chiste.
7. Había un hombre tan amarrete(Tacaño), que cierta vez toma un vuelo hacia USA.
   En pleno vuelo se va al baño y se queda dormido, en eso el avión sufre un desperfecto estrellándose, y mueren todos los pasajeros menos este tacaño que estaba en la cola del avión.
   Cuando llega la cruz roja y ven entera la cola del avión, se acercan y tocan la puerta del baño.
   El tacaño pregunta ¿Quién es?
   ¡La Cruz Roja!
   ¡Yaaa colaboramos!
8. Un señor va caminando por la calle, acababa de comprar una botella de vino. Había estado ahorrando media vida para comprarla. El señor que era bastante agarrado (egoísta) llevaba la botella de vino en el bolsillo de la gabardina, para que nadie se la viera. De repente al cruzar la calle le atropella un coche y al levantarse, ve que tiene todo manchado de rojo y dice:
   ¡Por favor Dios mío! ¡Que sea sangre, que sea sangre!
9. Iba una vez un atlante cruzando una calle de mucho tránsito, y cuando va por la mitad, ve que viene un coche a toda velocidad y le toca la bocina, y cuando intenta frenar ya es demasiado tarde y atropella al atlante, quien cae como a 20 metros adelante, todo ensangrentado y golpeado, enseguida se baja el conductor y le dice:
   No se preocupe buen hombre, no tarda en venir la cruz roja.
   Y el atlante le responde:
   ¿La cruz roja? ¡Otra vez no, si ya doné sangre ayer!
10. Un día Pepito fue a la escuela y la maestra pidió a los alumnos que para el día siguiente trajeran alguna cosa de la cruz roja, al otro día la maestra le pregunta a Pepito: ¿Qué has traido? Pepito respondió: Un tanque de oxigeno, y ella le pregunta: ¿Quién te lo dio?, mi abuelito respondió él y ¿Qué te dijo? Pepito: !!No te lo lleves, no te lo lleves!!
11. Habia un señor verde, que salio de una fermacia verde para comprar un farmaceutico verde, paso por el parque verde con muchos juegos verdes, el sol verde se iva escondiendo mientras el hombre verde se iva llendo en su coche verde de ruedas verdes y vidrios verdes, en una de esas va a vuscar plata verde adentro del coche, pipipi ;(
    y no ve a un pino verde que habia en medio de la autopista, al no verlo se estrolo contra el pino, y cuando se quisieron dar cuenta vino la cruz roja y les cago el chiste.
    este es el mejor chiste :E
    no me quiero agrandar

Contar chistes de cruz roja es una parte importantísima de cualquier conversación o reunión social. Los chistes, llenos de humor y diversión, tienen la capacidad de liberar tensiones y crear un ambiente relajado y alegre. Pueden contarse en cualquier situación, siempre y cuando sea apropiado y no ofenda a nadie. Contar chistes puede ser especialmente efectivo para romper el hielo al inicio de un evento social, hacer reír a los demás en medio de una conversación o simplemente alegrar el día de alguien que puede necesitarlo. Sin embargo, es esencial recordar que el sentido del humor puede variar de una persona a otra, y lo que para uno puede ser gracioso, para otro puede no serlo.