Chistes de Látigos
Estos son los 8 chistes de látigos y más graciosos bromas sobre látigos que matan de risa. Lea chistes acerca látigos que sean buenos chistes para niños y amigos en español.
Chistes de látigos para niños y niñas cortos y graciosos
¿Cuál es un buen chiste sobre látigos para hacer reír a la gente? Mira esta lista de historias divertidas que seguramente harán sonreír a todos.
- la mamà de jaimito fue a verlo al doctor le dijo que le pasa el medico le dijo se la pasa tirando todo el dia pasos y la mama le dijo pero que tiene el madico le dijo tiene wachiturritis y que le doy el medico le dijo le des latigo,latigo
- En un circo esta un domador con un latigo pagandole a los tigres para que brinquen por los aros de fuego y cuando termina le dice al publico ¿quien puede hacer esto? a lo que un jotito resdponde yo...pero no me peges tan fuerte
- El propietario de un circo ha puesto un anuncio solicitando un domador de leones.
Aparecieron dos personas: un hombre de buena apariencia, jubilado, llegando a 70 años y una espectacular rubia de 25 años.
El dueño del circo, habla con los dos candidatos y les dice:
- Mi león es muy fuerte y mato a mis dos últimos entrenadores. O ustedes son realmente buenos, o no van a durar un minuto! Aquí está el equipo: banco, látigo y pistola... ¿Quién quiere ser el primero?
La rubia dice:
- Voy yo.
Hace caso omiso del equipo, del látigo y la pistola y rápidamente entra en la jaula. El león ruge y empieza a correr hacia ella. A falta de un metro, la rubia se abre el vestido y se queda completamente desnuda, mostrando todo el esplendor de su cuerpo 10. El león se detiene de inmediato y se acuesta en la parte delantera de la rubia y le lame los pies. Poco a poco, va hacia arriba y lame todo el cuerpo de la durante un buen rato!
Al dueño del circo, se le cae la quijada al suelo y dice:
- ¡Nunca he visto nada como esto en mi vida!
Se gira y mirando al anciano y le pregunta: .
- ¿Usted puede hacer lo mismo?
Y el abuelo con cara de picarón dice:
- ¡Por supuesto! Pero primero saque al león de la jaula ... - Última oportubidad en el i**... Llegan tres hombres al i**...: un americano, un hindú y un español. El diablo les dice:
-Les daré una oportunidad de ir al cielo. Aquel que aguante tres latigazos míos se podrá ir. Antes de los latigazos podrán ponerse lo que quieran en la espalda, ¡a ver si los aguantan!
Los hombres aceptan. Primero va el americano, coge una enorme piedra y el diablo, al primer latigazo, la rompe. El americano grita desesperado:
-¡Vale!¡Vale!¡Me quedo!
Después le toca al hindú, que se arrodilla sin ponerse nada. Dice el diablo asombrado:
-¡Éste si que tiene dos cojones! ¿No te vas a poner nada en la espalda?
-No, ¡sólo necesito meditación!
-Bueno, como quieras...
Da el primer latigazo y el hindú sólo gime un poco, el segundo latigazo y el hindú tranquilo, da el tercero y el hindú fresco como una lechuga. El diablo le dice:
-Bueno, lo prometido es deuda, te puedes ir al cielo.
-Sí...-dice el hindú- pero antes quiero ver al español, que siempre gana en los chistes... Quiero ver con qué mariconada sale...
El español se arrodilla y tampoco se pone nada, a lo que el diablo dice:
-¿Tú tampoco te pones nada?
-¿Puedo ponerme lo que quiera?
-¡Lo que quieras!
-¡A ver, hindú c**..., VEN AQUÍ! - Un suicida mexicano llega al i**... y es recibido por una diablita que le sirve de guía para hacer un tour por el inmenso y caluroso lugar. Lo primero que le explica es que allí hay un i**... por cada país y empieza a mostrárselos:
-Este es el i**... alemán; Aquí cuando entras te sientan por una hora sobre el fuego producido por una enorme estufa a gas, luego te meten en una pileta de agua helada a 20 grados bajo cero, enseguida te sientan en una silla eléctrica durante dos horas, y finalmente viene el diablo germano y te azota con un látigo durante tres horas.
No, este no me gusta; muéstreme otro -dice el suicida.
-Bien -dice la diabla- Este es el i**... ruso; Aquí cuando entras te sientan por una hora sobre el fuego producido por una enorme estufa a gas, luego te meten en una pileta de agua helada a 20 grados bajo cero, enseguida te sientan en una silla eléctrica durante dos horas, y finalmente viene el....
-¡Oiga! aquí hacen lo mismo que en el otro... -interrumpe el suicida.
-Si -dice la diabla-, La verdad es que en todos los infiernos hacen lo mismo.
-Y si todos los infiernos son iguales, ¿por qué en ese de allá, están haciendo fila para entrar?
-Ah, es que ese es el i**... de un país latinoamericano. Y, aunque esta diseñado para los mismos castigos, no se pueden realizar porque allí nunca hay gas, la energía eléctrica no sirve porque se robaron los cables para vender el cobre, el agua la cortaron por falta de pago, y el diablo que es un burócrata, viene, firma la planilla y se va...! - Estaba María en un juzgado y el juez le pregunta:
María, me han dicho que usted mató a su esposo.
Y María le responde: Yo no lo maté, le voy a contar lo que pasó. Yo estaba lavando cuando el va y me empieza a tirar agua, y me dice: ¡Cómo que te llueve!, yo no dije nada. Luego me tira piedras y me dice: ¡Cómo que te graniza!, yo tampoco respondí nada. Después el cogió un látigo y me empezó a dar, y me dice: ¡Cómo que te relampaguea!. Entonces ya me dio rabia, cogí un machete y le di un solo golpe diciéndole: Como que te parte un rayo. - Un tipo hambriento entra a un restaurante; se sienta en una mesa sucia y ordena:
¡Ea, mesero, venga aquí por favor!
Pero nadie le hace caso.
Insiste:
¡Oiga, mesero, venga por favor!
Nuevamente, nadie le hace caso.
Mientras espera, mira hacia la mesa y ve a 15 hormigas 'punk' en motos, armadas con bates, cadenas, navajas y látigos persiguiendo a una sola. La hormiga solitaria vestía chamarra negra, pantalón de cuero, botas negras y conducía una motocicleta plateada.
El hombre, asombrado, observa como el grupo de 15 hormigas intenta atrapa a la hormiga solitaria, cuando, de pronto, la hormiga solitaria da un giro de 180 grados en su vehíc**..., saca un látigo y de un sólo golpe tumba a 6 hormigas; se da la vuelta y sigue su camino.
Las cosas se están poniendo buenísimas, pensó el tipo. Hasta el apetito se le había quitado.
La persecución continuaba, y todas iban a la máxima velocidad esquivando vasos y platos, de improviso, la solitaria saca del bolsillo una bomba de humo; enciende la mecha y la arroja hacia la pandilla. El humo se expandió rápidamente haciendo que las perseguidoras tuvieran poca visibilidad y dos hormigas más cayeron al suelo. Ahora únicamente quedaban 7.
Varias hormigas le arrojaban navajas tratando de agujerear las llantas. Pero la hormiga era sorprendente y se movía de lado a lado. Colérica, la hormiga jefe, una enorme roja, bien fortachona, saca una cadena larga y le pega un latigazo en el brazo a la solitaria. Ésta perdió el equilibrio y se estrelló contra un grano de arroz; rápidamente la hormiga se levantó y se subió a la moto, pero cuando levantó la mirada estaba rodeada. Las 7 hormigas punk, irritadas, sacaron sus armas; empiezan a acelerar sin avanzar, la otra hace lo mismo. Entonces las punk aceleran a toda velocidad con las armas al frente, la solitaria saca una cadena y de pronto...
Llega el mesero y limpiando la mesa dice:
¿Qué le sirvo, señor? - Esto era un hombre que estaba hablando con un amigo y sale el tema de los animales:
- Pues yo tengo un cocodrilo que me chupa la polla.
- No puede ser, es broma.
- Que no, si quieres ven a mi casa y te lo enseño.
Y van los dos a su casa.
El cocodrilo estaba en una jaula y va el propietario del cocodrilo y deja salir al cocodrilo de su jaula y coge el latigo. Entonces le da con el latigo y le dice:
- Chupa!!! Chupa!!!
Y el cocodrilo chupaba cada vez que le daba con el latigo y le decia chupa.
Entoces va el propietario al que le estaba chupando la polla el cocodrilo y le dice a su amigo:
- Quieres probarlo?
Y responde su amigo:
- Vale pero a mi no me pegues tan fuerte.
Contar chistes de látigos es una parte importantísima de cualquier conversación o reunión social. Los chistes, llenos de humor y diversión, tienen la capacidad de liberar tensiones y crear un ambiente relajado y alegre. Pueden contarse en cualquier situación, siempre y cuando sea apropiado y no ofenda a nadie. Contar chistes puede ser especialmente efectivo para romper el hielo al inicio de un evento social, hacer reír a los demás en medio de una conversación o simplemente alegrar el día de alguien que puede necesitarlo. Sin embargo, es esencial recordar que el sentido del humor puede variar de una persona a otra, y lo que para uno puede ser gracioso, para otro puede no serlo.